martes, 1 de marzo de 2011

Cuando se esconden las miradas solo queda el silencio.
Y el silencio nos abandona facilmente, con cada respiro con cada paso que damos perdemos un poco la fe.
Somos prisioneros de la vida, prisioneros del destino.
Si tan solo pensáramos bien.
Con una sonrisa rota, y mi fe en los bolsillos camino hacia mi destino.
Cualquiera que sea, he perdido la fuerza, aveces un poco el camino pero lo he vuelto a encontrar, se que te escondes lejos de mi y no quieres volver aun..
Se que te aparto por temor a mi y ahora ando caminando sola.
Solía soñar, pero eso ya acabo.
Lo perdí todo, hasta la forma de caminar, solía ser la que reía.
Y un final sin magia, un poco trágico.
Fue el que me alcanzo, sentí como me infectaba, y luego un respiro.

Perdí mi tiempo, no se cuanto he llorado, solo mi alma puede contar lo que es amar.
Y la magia acaba, cuando algo es trágico, no puedes sostenerlo entre tus manos.
Pero si hay un final al cual acudir.
Un poco agridulce, pero de seguro mejor que ver morir tus sueños.
Me siento aislada, apartada, me digo que ya esta.. que simplemente salte.
Pero las palabras se desvanecen, las paredes me acechan.
Miro por una ventana.. pero para que? solo hay una plaza sin palomas, dos ancianos y una rosa en la calle.

El brillo del sol bajo, la lluvia corre sobre algún techo, y en mi piso 5 todo es igual, esperare un final, no seguiré sentada; me levantare y caminare al oírte entrar, pero mi cuerpo es obsoleto, y la tenue luz de una vela se apaga.
Y, quedo sola, sin luz, sin palomas y sin sol.. Mi mente y mis miedos, mi agonía.
Y mi simpática idea de huir.

En mi intento por ganar, perdí.
En mi intento de ser mejor, fracase.
En mi intento de ser feliz, fui miserable.


Si leo entre lineas mis historias deprimen y no tienen final, si me quedo tranquila no podre, es realmente trágico el querer mas, es realmente triste el no querer seguir, si eres tan feliz, porque huir?
No odiare el lugar, ni ala persona, no odiare el momento.. Odiare la manera de actuar, la forma de hablar, como si algo de esto cobrara sentido, que estas logrando?
Algo torpes a la hora de opinar,
Porque se detienen a juzgar? porque detenerse a hablar cuando no tienen nada de que hablar?
Les gusta llenarse de falsas risas y premios baratos, suponiendo que los tengan.
La obra ya debió acabar pero ellos siguen de pie alabando, ellos siguen siendo las mismas bestias hambrientas que necesitan aclamar,
Porque ser un chico rudo y vil? Porque no sonreír y hablar de otra manera?
Porque no tienen mas salida por la cual escapar?
No mas idiota de lo normal, pero esta vez tenia un brillo ejemplar, que fue lo que cambio en las ultimas horas?
Que la hizo tan absurda y sombría que nada de lo que viera a su alcance la haría realmente brillar?
Pero errados eran su sueños, fingidas sus sonrisas que morían con cada amanecer, un alma de la noche, un sombrío pasado sobre su espalda la hacia temblar, y no quería volver jamas, ya no.

Vulnerable y solitaria, pero que podría esperar? la mañana murió despacio mientras ella en silencio agradecía por el ultimo vistazo a la luz del sol.
Este vació solía ser gris, pero de vez en cuando entra un rayo de luz que ilumina todo.
Sus miradas cruzaban una vez mas el salón, para comprobar que todo seguía igual.
El acaricio su mano para luego tomarla entre las suyas y besarla.
Se levanto de su asiento, cruzo la habitación y salio.

Ella lo siguió con la mirada, sus ojos se empañaron.
Ya todo estaba dicho.
El volvió y le sonrió, se sentó a su lado y suspiro.
El sabia todo, incluso mas, esto no duraría mucho tiempo ahora que sabia que no habían secretos, casi.

Se abrió la puerta, y ella estaba lista, se paro y camino erguida, no era un final.
Pero posiblemente seria difícil.
Se sentó tan sola como solía hacer, pero esta vez no lloraba, solo veía al vació, pensaba sobre su pasado, su futuro y lo que suponía seria su presente.
Se sentaba tan sola como siempre, miraba al vació y contenía unas cuantas lágrimas.
Se sintió tensa, pero luego relajo su cuerpo, bostezo y hasta se hecho a reír al pensar que su situación podría cambiar.
Pero ella lo sabia, sabia perfectamente que se equivocaba, que nunca jamas cambiaría.
Que siempre se sentaría allí luego de otra oportunidad desperdiciada. Si, ella sabia que en algún momento de su vida acostumbraría a su cuerpo al dolor que suponía la decepción.
Alboroto su cabello, miro al horizonte, y supo que todo podría ser una mentira, un invento de una mente retorcida, pero por mas que ella lo quisiera no era verdad.
Y allí estaba ella, suspirando, rezando, llorando y riendo, una y mil veces por la misma razón, estaba loca? Quien sabe, pero a pesar del dolor, siempre seguirá intentándolo.